jueves, 21 de septiembre de 2017

DESPUÉS DE LA HUELGA MAGISTERIAL: ¿QUÉ?

Sigfredo Chiroque Chunga

De junio a agosto del presente año, alrededor de un 92% de los docentes del país han participado de manera directa o indirecta en una huelga atípica en tiempos dispares. Asumiendo un enfoque popular y pasado el movimiento huelguístico, importa precisar las tareas pendientes que han quedado.
1.     La Educación como derecho y como interacción de Sujetos es un criterio por profundizar y operativizar.
a)    Quienes asumimos un enfoque popular, reconocemos que la educación es un derecho exigible, irrenunciable, indivisible y auto determinado. Durante la última huelga, las autoridades del MINEDU siempre han hablado del “servicio educativo” y algunos dirigentes también. ¿Cómo defender que la educación es un derecho también en tiempos de huelga?
b)    Desde la Pedagogía crítica y la educación popular-liberadora, destacamos que la naturaleza de toda práctica educativa es una relación de sujetos. Si hay sujetos, también hay derechos-deberes específicos de cada uno de ellos: (a) Derechos-Deberes de los Sujetos que aprenden, los estudiantes; (b) Derechos-Deberes de los Sujetos que enseñan, los docentes; y (c) Derechos-Deberes de los Sujetos que constituyen el entorno, donde se establecen determinaciones y/o condicionamientos del aprendizaje y de la enseñanza. Los derechos de unos Sujetos no pueden concretizarse, aplastando o dejando de lado los derechos de los otros Sujetos. ¿Cómo conjugar los derechos de los Sujetos (digamos, Estudiantes-Docentes-Comunidad) durante la huelga, al negociar resultados y después de la huelga?

2.     “Recuperación de clases”.
Los Estudiantes tienen derecho a desarrollar aprendizajes, según lo previsto; pero, ellos se interrumpieron durante la huelga. Los docentes tienen derecho a que se les pague, por el trabajo que de veras realizan. Algunos docentes que han estado en la huelga se resisten a trabajar de veras para recuperar las horas perdidas. Pero, a su vez, el MINEDU pone resistencias a pagar lo que debe a los maestros y maestras. Quienes asumimos la Educación Popular-Liberadora debemos ser firmes en cumplir –también por ética- el trabajo de recuperación de clases, pero también firmes en hacer cumplir que se nos pague por el trabajo realizado.

3.     Exigencia en la mejora del piso salarial docente desde noviembre 2017.
En el 2015 e inicios del 2016, PPK prometió elevar el piso salarial docente a 2 mil soles apenas fuese electo. Después de juramentar como Presidente de la República, tomó previsiones presupuestales (setiembre 2016), para cumplir su promesa en dos tramos (enero 2017 y mayo 2018). No ejecutó su previsión presupuestal. Recién con la Huelga de los Sute Regionales se adelantó a noviembre 2017 la promesa de un piso salarial docente de 2 mil soles. Los docentes, con enfoque popular, queremos mejorar nuestros ingresos pues tenemos derecho a vivir con dignidad y en condiciones de ser profesionales de calidad, para mejorar nuestros desempeños docentes. No tenemos la tesis de “ganar más, para consumir más”. Por eso, debemos velar porque se cumpla la elevación anticipada del piso salarial.

4.     Cumplimiento de incrementos salariales al 2021.
Ante la Huelga de los Sute Regionales, el compromiso público de las autoridades del MINEDU ha sido que al 2021 el piso salarial será equivalente al valor de una (1) Unidad Impositiva Tributaria. El valor de la UIT en este año es de S/ 4,050; pero, se incrementa anualmente. Al 2021, una UIT podría ser equivalente a los S/ 4,500. Y este piso salarial (para la I Escala Magisterial y con 30 Horas Semanal Mensual) sería un paso muy importante en el campo remunerativo del magisterio peruano, teniendo docentes que viven con dignidad y con ingresos que hacen posible, por ejemplo, plasmar iniciativas propias de mejoramiento profesional. Comenzaríamos a revertir la tendencia decreciente de quienes desean ser profesionales de la educación. Si no se dan estos cambios, para el 2030, se tendría un déficit de 120 mil profesionales de la educación según estimaciones de Hugo Díaz y de 100 mil, según propias estimaciones.

5.     Efectivización de mejoras de docentes contratados.
Desde setiembre 2017, los docentes contratados deberían tener también el beneficio del pago de compensación por tiempo de servicio y subsidio por luto y sepelio.

6.     Concreción y ampliación del derecho por “deuda social”.
Desde el 2018, hay 200 millones de soles para pago de la deuda social, en los casos ya judicializados. Debemos exigir que el Estado, por oficio, deba cancelar esos adeudos sin necesidad de judicialización. Quienes creemos en la Educación Popular debemos ser firmes en la defensa de los derechos nuestros y ajenos.

7.     Relativizar la jubilación anticipada.
Algunos sienten que están presionados y saturados en su trabajo docente. Por ello, la última huelga ha conseguido que haya la posibilidad de una jubilación anticipada, a los 55 años. Esta posibilidad, desde un enfoque popular, debemos relativizarla, pues lleva a acelerar la disminución de los docentes nombrados. De esta manera, aumenta el número de contratados y –a la larga- coincide con la tendencia neoliberal de la “flexibilidad laboral” o “desregularización de la fuerza de trabajo” en el magisterio peruano, hasta un punto de desaparecer los nombramientos docentes y, con ello, la misma carrera pública magisterial.

8.     Continuar en la lucha por mejorar las condiciones de educabilidad de nuestros estudiantes.
La Huelga de los Sute Regionales consiguió almuerzos para los Estudiantes Pobres de quienes están en Jornada Educativa Completa (JEC). Debemos relevar que los maestros nos preocupemos por mejorar las condiciones de educabilidad de nuestros estudiantes. Hay que proseguir en esta dirección, pero ampliando nuestras demandas de mejorar las condiciones de educabilidad de todos los estudiantes de los sectores populares, área rural y zonas amazónicas.

9.     Precisar nuestra posición sobre la evaluación de desempeños.
Importa recordar que el acento en los “desempeños” ha surgido desde la pedagogía crítica y socio-cultural. Por ello, desde más de 20 años, se ha repetido que deberíamos evaluar no tanto “logros de aprendizaje”, sino evaluar “aplicación de los aprendizajes logrados” (es decir, desempeños). Pero, asumir este enfoque supone que: (a) Los “desempeños” son objeto en cualquier tipo o modalidad de evaluación; (b) Los desempeños deben ser objeto de evaluación, para ingreso, para ascenso, para permanencia o traslado en área ocupacionales de la Carrera Pública Magisterial, (c) La llamada “evaluación de desempeños” no es sino una “evaluación de permanencia en la CPM”; (d) Los desempeños docentes no pueden ser plena y confiablemente evaluados en 60 minutos; ( e) Si una confiable evaluación de permanencia en la CPM establece que alguien no tiene adecuados desempeños docentes, debería ser retirado de su relación directa con los educandos, por el derecho que éstos tienen a tener una enseñanza de calidad; pero, por el derecho al trabajo y la estabilidad laboral que tiene un docente ya nombrado, debería ser reubicado en otras funciones, mientras no acredite desempeños adecuados; y (f) Lo dicho debería llevar a una modificatoria del Art. 23 de la Ley de Reforma Magisterial.

10.  Activación de las Mesas de Trabajo a nivel regional y nacional.
El MINEDU, a propósito de la última Huelga, derivó muchas cuestiones a ser discutidas a nivel regional. De esta manera, en la práctica, se comenzó a desconocer el D.S. 013-MINEDU-2016 que prohibía toda negociación sindical con las regiones. Hay que pedir la derogatoria formal de este dispositivo contrarios al derecho de sindicalización y que el mismo Tribunal Constitucional anuló lo referente a que el sindicato ya no podía hacer reclamos salariales. De igual manera, hay que promover la activación de las mesas de trabajo a nivel regional y nacional.

11.  Superar la contradicción legalidad y legitimidad en nuestro sindicato.
Es evidente que la última huelga develó que el CEN del SUTEP y las dirigencias regionales reconocidas por el CEN tenían “legalidad”, pero perdieron el reconocimiento o “legitimidad” de los maestros de base. Al revés, las dirigencias de los Sute Regionales fueron creciendo en “legitimidad”, aunque solamente unos pocos tienen “legalidad”. El SUTEP debe ser recreado con legitimidad y legalidad simultáneamente, teniendo dirigencias democráticamente electas, con ética y capacidad de organizar el movimiento magisterial sin componendas con el MINEDU.
12. Intervención en la revisión del Currículo Nacional y en la elaboración de los Currículos Regionales diversificados.
La “revisión del Currículo Nacional” fue aceptada por el MINEDU durante la última huelga. El nuevo Ministro de Educación Idel Vexer también ha señalado que buscará mejorar el currículo nacional. Además, la misma normatividad existente permite la “diversificación curricular” a nivel de regiones y de instituciones educativas, así como la “adecuación curricular”, según los rasgos de los estudiantes con quienes se trabaja. Los docentes con enfoque popular deberíamos prepararnos para intervenir en estos procesos de revisión, de diversificación y adecuación curricular. De manera propositiva, debemos buscar concretizar un enfoque popular también en el campo curricular.

13. Elaborar propuestas para:

a)    Detener el proceso de privatización de la educación;
b)    Diseñar y reivindicar un Plan para el nombramiento de no menos del 95% del magisterio nacional en servicio;
c)     Reorganizar a los Docentes Cesantes y Jubilados, para intervenir con ética y eficiencia en el manejo de sus bienes y para mejorar las condiciones de vida de este sector, no menos a los 100 mil docentes.
d)    Replantear la estructura del gasto de no menos del 6% del PBI en educación;
e)    Democratizar con eficiencia la institución de todos los docentes peruanos, Derrama Magisterial.