domingo, 6 de mayo de 2018

EDUCACIÓN EN TIEMPOS DE VI-VI


EDUCACIÓN EN TIEMPOS DE VI-VI
El Ingeniero Martín Vizcarra es Presidente del Perú desde el 23 de marzo del presente año. Y el Administrador César Villanueva es Presidente del Consejo de Ministros, desde el 03 de marzo. Vizcarra-Villanueva (VI-VI), entonces, ya están en el Gobierno, hace más de un mes. Pasado este lapso de tiempo,  es lícito que los educadores nos preguntemos: ¿Qué se nos viene en educación durante la gestión de VI-VI?

SITUACIONES SIGNIFICATIVAS INICIALES
Más allá de las especulaciones, importa señalar cinco hechos significativos, dentro del Sector, ya en tiempos de VI-VI:
Ø  El economista Daniel Alfaro Paredes es nombrado como Ministro de Educación y juramentó también el pasado 03 de abril.
Ø  Aproximadamente un 35% del magisterio nacional realizó un paro preventivo en el pasado mes de abril. La medida de fuerza fue organizada por los SUTEs Regionales que buscan legitimidad y legalidad.
Ø  Han pasado más de 30 días y hay asientos vacíos en la Alta Dirección del Ministerio de Educación (MINEDU); por ejemplo, no hay Viceministro de Gestión Pedagógica, ante la renuncia irrevocable de Guillermo Molinari (quien fue llevado por Idel Vexler). El economista José Chávez Cuentas, a la fecha, está como Viceministro de Gestión Institucional y encargado de Gestión Pedagógica. ¿Qué pasa en Educación? ¿No hay capacidad para seleccionar a las autoridades más importantes del Sector?
Ø  Mediante el Decreto de Urgencia Nº 005-2018 (4 mayo 2018), se reducen en unos 969 millones de soles los gastos del Gobierno Central. Más de la quinta parte de esta reducción (208 millones 303,665 soles) corresponde al MINEDU. Éste tendrá que ajustar sus gastos en seminarios, talleres, compra de libros, viajes, publicidad… El acompañamiento a instituciones educativas desde la Sede Central, Direcciones Regionales y UGEL ciertamente sufrirá un duro golpe.
Ø  En la “Exposición del Presidente del Consejo de Ministros, César Villanueva Arévalo, ante el Congreso de la República” (EXP.OPCM del 02 mayo 2018) estableció “la Política General del Gobierno y las principales medidas de gestión que ejecutará este gabinete ministerial durante los próximos tres años” también en materia educativa.
Asumimos que lo dicho en el Congreso por el Gobierno de VI-VI, establece explícitamente los lineamientos centrales de su trabajo en el campo educativo, hagamos un análisis crítico de estos planteamientos, señalando las cosas positivas y sus limitaciones.

ANUNCIOS DE CONTINUIDAD
1)    Enfoque.- Hay un correcto objetivo que alcanza también a Educación: “Mejorar  la calidad de vida de los peruanos” (EXPO-PCM, p. 2). Pero, a la Educación no se le asume como un “derecho”, sino como un “servicio (que debe ser) de calidad” (EXPO-PCM, p. 4). Implícitamente se reduce a la educación a ser un medio del desarrollo humano, cuando ella es también un  fin del desarrollo humano. 
2)    Reforma educativa.- Se anuncia que “nuestro gobierno está firmemente comprometido con la reforma de la educación. Tenemos que recuperar el tiempo perdido y poner el pie en el acelerador” (EXPO.PCM, p. 21). Implícitamente se acepta la existencia de una “reforma educativa” en marcha, pero ella –a pesar de su necesidad- no existe. Lo que hay son medidas sueltas y desarticuladas sin enfoque holístico de reforma.
3)    Calidad educativa y rendimientos escolares focalizados.- Regresivamente se confunde que mejorar la calidad educativa es sinónimo de mejorar los rendimientos estudiantiles en matemática y en comprensión lectora (EXPO-PCM, p. 22),. Doble equivocación: La calidad educativa es una categoría que va más de los “rendimientos” y una formación integral es algo más que mejorar en matemática y comprensión lectora.  Ya el Ministro Saavedra comenzó a superar estas tesis que –bajo el supuesto de una “moratoria curricular”- dejaban de lado la formación en ciencia, en ciudadanía y en valores. Con este reduccionismo, un enfoque de formación integral e integrada desaparece en los compromisos y metas para educación, a pesar que se reconoce el rol de la educación en la lucha contra la corrupción y en el desarrollo económico y productivo (EXPO-PCM, p. 8).
4)    Público/Privado.- Hay en marcha un proceso de privatización de la educación. Excluyendo la matrícula universitaria, este año (2018)  de alrededor de 8 millones y 800 mil estudiantes, más del 30% de ellos está en el sector privado. Nada se dice  sobre este proceso.
5)     Nombramiento de docentes.- El año pasado (2017), de 381,853 docentes laborando para el Estado, unos 230 mil estaban nombrados y el resto eran contratados. Un 60.2 nombrados y un 39.8% contratados. La ortodoxia neoliberal inexorablemente estaba conduciendo a la desregulación de la fuerza de trabajo docente.  El Gobierno de VI-VI  promete nombrar a unos 38 mil docentes. Si cumple esta positiva promesa, los contratados bajarían al 30% y esto resulta alentador, no solamente por el mejoramiento en las condiciones laborales de los/as docentes, sino por el distanciamiento que se plasma de la ortodoxia neoliberal.
6)    Énfasis en la Educación Básica Regular.- La prédica gubernamental solamente se focaliza en los Estudiantes de EBR. Nada dice de los 8 millones 828 mil jóvenes y adultos que no han iniciado y/o culminado su Educación Básica. La llamada Educación Básica Alternativa (EBA) solamente atiende al 2.7% de su potencial demanda.
7)    Currículo.- Lo que se debe aprender y enseñar se encuentra en el Currículo. El nuevo “Currículo Nacional de Educación Básica” (CNEB, 2016) debe sufrir reajustes para el caso de EBR. Aún más, no puede usarse como camisa de fuerza para Educación Básica Alternativa t mucho menos para el caso de Estudiantes con Necesidades Educativas Especiales.
8)    No menos del 6% del PBI para educación.- Nada se ha dicho sobre los recursos presupuestales para Educación. El Ministro Saavedra algo hizo para incrementar estos recursos; pero, posteriormente, ellos han ido cayendo a cerca de un 2.8%. Obviamente, poco se puede hacer si s reduce la presión tributaria.
9)     PEN al 2036.-  Hay en marcha la elaboración de un Proyecto Educativo Nacional al 2036. Esto está muy bien. Pero, esta medida estratégica debería ser asumida y relevada desde los niveles más altos del Gobierno.